Invernaderos

Galvanizado por Inmersión en Caliente

El tipo de protección anticorrosiva más difundido en invernaderos metálicos es la galvanización por inmersión en caliente. No obstante, existen diferencias fundamentales entre los distintos procesos de galvanización adoptados por las empresas, por lo que éste es uno de los puntos de mayor relevancia ante la decisión de la compra de una estructura, la cual deberá soportar un ambiente altamente corrosivo como es el microclima dentro de los invernáculos.

El proceso de galvanización utilizado por A.D.C. Invernaderos es aquel que se realiza por inmersión en un baño de zinc a una temperatura aproximada a los 450°C, siendo considerado este el proceso más efectivo de protección anticorrosiva del acero. La totalidad de las piezas que componen nuestros invernaderos tienen este tipo de galvanización, logrando una protección total y homogénea de la estructura. 

Es importante saber que la vida útil del material que conforma un invernadero está directamente relacionada con el espesor de la capa protectora de zinc que lo recubre (cuadro l).

El proceso elegido por A.D.C. Invernaderos deposita sobre el acero una capa protectora de zinc cuyo espesor ronda los 130-150 micrones en ambas caras equivalente a unos 1.000 gr/m2, (casi cuatro veces mas que la capa protectora que presentan los invernaderos fabricados con proceso Sendzimer cuyo recubrimiento es de 275 gr/m2, equivalente a 36-42 micrones en ambas caras), lo que garantiza una protección anticorrosiva por más de 30 años, con costo de mantenimiento nulo.

Otra de las ventajas del proceso utilizado por A.D.C. Invernaderos se basa en el hecho de partir de material conformado y su galvanización posterior, lo cual evita la oxidación en bordes que se ve al cabo de algunos años en las piezas de invernaderos cuya materia prima es la chapa galvanizada, que se conforman con posterioridad, especialmente abrazaderas, canaletas y perfilería en general.

A.D.C. Invernaderos, para toda la vida.